MODA & TENDENCIAS
La firma invita a diseñadores y creativos a unirse a este proyecto de colaboración en busca de diseño y nuevos talentos, con el que promete abrir nuevas fronteras en la industria de la joyería y fortalecer aún más el legado de Aristocrazy como una marca icónica en constante evolución
Desde su origen, Aristocrazy ha abrazado la creatividad como un pilar fundamental de su identidad, reconociendo que, sin ella, el diseño es tan incompleto como el día sin la noche. Estos dos conceptos, aparentemente opuestos, coexisten en armonía, y es precisamente esta dualidad la que ha llevado a Aristocrazy a crear "La incubadora de talento”. Esta enriquecedora propuesta invita a diseñadores, tanto internos como externos, a participar en este espacio para fomentar el talento y la creatividad con una ambiciosa fórmula: trabajar en equipo para desarrollar nuevas propuestas que reflejen una visión fresca e innovadora de la joyería.
Aristocrazy se aventura por un nuevo sendero, al fusionar en una incubadora a nuestros diseñadores de casa con aquellos que, con su perspectiva fresca del mundo exterior, desean aportar la riqueza de su talento y colaborar en la creación de nuevas colecciones. Para ello, la firma se ofrece a poner a su disposición todo su conocimiento y experiencia y a brindarles acceso a nuevas formas de trabajo, conectándolos con artesanos joyeros y gemólogos certificados. Es la danza del talento, la sinfonía de la creatividad, unidos en un coro de innovación y belleza, que reverbera en cada joya Aristocrazy.
En esta primera edición, 10 talentosos diseñadores seleccionados han tenido la oportunidad de presentar sus ideas y desarrollos frente a un equipo de la marca.
De entre ellos, se ha seleccionado a tres ganadoras, cuyas creaciones e ideas se materializarán en piezas que, de alguna forma u otra, formarán parte de las prestigiosas colecciones de Aristocrazy.
Cristina, licenciada en Bellas Artes en Bilbao y con un ciclo superior de joyería artística en Barcelona, emprendió hace tres años una aventura: su marca de joyería Luznegra, en la que integra su pasión por el arte, la historia, el diseño y las piezas antiguas. Cuenta con un estilo fuerte y original muy marcado por su discurso personal.
Irene, una artista de origen armenio que estudió bellas artes en Valencia y los grados de fabricación de joyería y cerámica, lleva seis años trabajando en su propia marca: Iren Bznuní. Destaca por su gran sensibilidad y naturalidad manifestada en sus diseños, llenos de espontaneidad, y su forma de trabajar experimental, piezas con un singular estilo orgánico, con un aura de libertad, toques deconstruidos y sutiles detalles.
Daria Pacelli, diseñadora de Joyas y artesana, fue alumna del Instituto Europeo de Diseño, donde aprendió que no hay límites cuando hablamos de creatividad. Pero fue en la escuela Jorgc de Barcelona donde encontró su lugar para evolucionar como artista y artesana y así poco a poco encontrar su camino para fundar su propia marca. Se expresa mediante piezas que interpretan siluetas espontáneas, tan atemporales como modernas.
"La creatividad está servida", afirma Aristocrazy, mientras abraza los valores que definen su esencia: diseño, comunidad y un amor apasionado por la joyería. La marca valora enormemente el esfuerzo de este proyecto y actuará consecuentemente, estableciendo bases legales sólidas para proteger los conceptos creativos presentados y proporcionando una compensación económica a todos los participantes, independientemente de si sus propuestas resultan ganadoras. La colaboración y el deseo de crecer se convertirán en un viaje que la marca pretende repetir en futuras ediciones.
En definitiva, "La incubadora de talento" representa un paso audaz en la búsqueda de la excelencia creativa y el diseño innovador, y Aristocrazy se complace en invitar a diseñadores y creativos a unirse a esta emocionante iniciativa. Esta fusión de talento promete abrir nuevas fronteras en la industria de la joyería y fortalecer aún más el legado de Aristocrazy como una marca icónica en constante evolución.
